Quien actualmente lidera el proyecto del colegio Antonio Varas y es uno de los cuatro postulantes que participará en la primaria de Chile Vamos que el 9 de junio elegirá la carta única que representará al sector en octubre de 2024, remarca que es clave publicitar los lugares con sello turístico y tradicional para atraer a los turistas.

 

 

Enrique Silva lleva más de 24 años viviendo en  el centro de  Vicuña (cercano al hospital). Originalmente es de Quilpué, pero el 2000 se trasladó a la ciudad elquina  y actualmente lidera el proyecto educativo del colegio Antonio Varas como sostenedor.

Es  candidato independiente en un cupo de Evopoli y uno  de los cuatro postulantes que participará en la primaria de Chile Vamos que el 9 de junio elegirá la carta única que representará al sector en octubre de 2024.

En entrevista con periódico El Daín.cl confiesa que todo lo que le ha dado la comuna, “sobre todo en el ámbito familiar, ahora quiero retribuirlo. Así como soy apoderado del colegio Antonio Varas y también soy sostenedor, quise transformar para mis hijos el mejor colegio y con la mejor educación  que beneficiara a todos, también  quiero hacerlo con la comuna, transformarla en la mejor donde vive mi familia”.

 

-¿Qué lo motiva participar en Las Primarias para transformarse en candidato  alcalde por Vicuña?

“Me interesa dar respuesta a muchas necesidades e inquietudes de los habitantes de Vicuña porque cuando uno recorre la comuna y el valle en general encuentra que existen muchos problemas  y que son locales  y no han sido atendidas por mucho tiempo. Por ejemplo, Diaguitas tiene problemas distintos a Andacollito,  Chapilca o Marquesa y veo que pasan los años y el tiempo  y  la gente sigue esperando, por ejemplo, una solución del alcantarillado o alumbrado público. Han existido avances en distintas áreas, pero, muchas veces, no hay respuestas concretas. Hay titulares que muestran a Vicuña muy lindo y turístico, pero no en lo particular. Me da pena que viva con problemas de delincuencia,  salud  y que no hay espacios para el deporte (…) Aquí hay que trabajar con los mejores  y respetar la dignidad de las personas, de considerarlas y hacerlas participar. Quiero aportar desde mi experiencia  y formación, para que la comuna progrese, que tengamos una mejor economía  y  si lo hice desde la calidad de sostenedor de un colegio particular subvencionado donde han pasado 8 años desde ese inicio, por qué no  lo puedo hacer en la comuna. Estoy con toda la energía, entusiasmo, la motivación para replicar este tipo de modelo de excelencia  en una comuna  donde todos y todas nos sintamos parte de ella”.

-¿Cuál es su plan para la ruralidad de Vicuña?

“Primero, hay que hacer participar a las comunidades, cuando no se les escucha surgen los problemas. Por ejemplo, hay problemas en Nueva Talcuna en seguridad vial porque los camiones pasan a toda velocidad, allí hay una necesidad local y no se ha resuelto. Es oscuro, no tienen aceras, ni pensar en una ciclo vía, por lo que hay que intervenir escuchando a las personas”.

RESPETANDO LAS NORMATIVAS VIGENTES

-¿Cuál es su mirada  de la convivencia entre la minería, las localidades y comunidades?

“Hay una cosa que tiene que ser complementaria, generar empleo por un lado y eso activa la economía local, pero siempre  respetando la normativa vigente en términos de los estudios de impacto ambiental, la seguridad y certeza que le da a las comunidades aledañas las obras de  gran envergadura. Soy respetuoso de las inversiones que pueden hacer  estas empresas, pero siempre  resguardando la integridad del entorno  y el medio ambiente”.

-¿Percibe que la crisis  hídrica ha colocado en riesgo mucha de las fuentes laborales y actividades tradicionales de la ruralidad, provocando un fuerte migración campo-ciudad?

“Es un tema súper complejo porque la escasez hídrica es un fenómeno que llegó  para quedarse por lo que culturalmente tenemos que adaptarnos a esto. Habrá algunas lluvias que alivien en forma momentánea, pero hay estudios internacionales de principios de los ’90 que hablaban que el desierto de Atacama en el 2050 se extendería hasta la provincia del Biobío y no hubo ninguna medida visionaria  de decir, preparémonos para esa eventualidad. Pero, la escasez hídrica va de la mano de la ganadería y la agricultura y si hay dificultades con ello habrá desempleo  y con ello una crisis importante y la gente emigrará a otras ciudades  y se perderá la identidad y habrá localidades fantasma como ocurrió en el norte de Chile con las salitreras. Es por ello que hay que tener un  pensamiento de corto, mediano y largo plazo. Lo corto es tomar medidas directas en favor de nuestros agricultores, quizás, se han hecho, pero no lo suficiente. Lo otro es resguardar lo poco de agua que hay. No podemos permitir que un camión aljibe en las plazas de Vicuña arroje chorros de agua. Aquí falta ocupar tecnología y tecnificar como lo han hecho algunas comunas de la Región Metropolitana y han ahorrado hasta el 85 % del agua”.

DESTACAR LAS BONDADES DE ÁREAS ALEJADAS

-¿En sus recorridos por las zonas alejadas, percibe que el turismo rural podría ser una alternativa en el campo?

“Primero, hacer participar a los crianceros y agricultores para fortalecer el turismo rural. Hay muchas ideas, sobre todo en los clubes de huaso y agrupaciones folclóricas  que están vinculadas al mundo rural y necesitan espacios  para ofrecer sus productos que son típicos y tradicionales como el queso de cabra y artesanías que fabrican. Pero, además de espacio necesitan promoción. No puede ser que lugares tan típico que se reconoce internacionalmente como Chapilca donde están las tejedoras hoy día pasen cerrados porque no llega el turista y el comprador, porque no lo sabe y no hay ninguna promoción. Tenemos la mirada del turismo rural como el pariente pobre, pero  debiera ser todo lo contrario, porque esta comuna es semi rural donde muchos viven en torno a la ruralidad, por lo que a esas personas hay que escucharlas y, además, darles oportunidades y entregarles recursos  y asesorarlos de cómo presentar proyectos”.

-Usted tiene experiencia en el ámbito educacional, ¿Cómo se debería enfrentar la disminución de alumnos en las escuelas rurales?

“Mi experiencia  de ser autoridad educacional en su momento como jefe provincial  y seremi (s) de educación me hizo conocer la realidad de las diferentes comunas y las escuelas unidocentes  donde efectivamente habían dos o tres alumnos y una señora que cocinaba y eso también ocurre en algunos sectores de Vicuña. Ahora, es difícil donde la demografía es baja, por  lo que se debe  integrar a esos estudiante a unidades educacionales más grandes para que puedan participar. En el colegio Antonio Varas donde yo he tenido la oportunidad de participar invito a otras comunidades educativas porque quiero que sean parte de ello y acercarlos. Hay una propuesta de hacer seminarios, congresos, pasantías, aunque dependería si los colegios pasan al Servicio Local de Educación, pero mientras sea municipal, la ida es hacer inclusión y lo otro importante es el transporte escolar rural, porque en algunos casos alumnos tienen  que hacer dedo para llegar a sus hogares y los estamos exponiendo a una desgracia, por lo que falta una preocupación por el traslado”.